Se pueden observar los soberbios torreones y las almenas; las elegantes y pequeñas ventanas; los matacanes; los arcos ciegos que cruzan toda la torre. Pasando bajo la misma, se puede observar la perfección de los arcos de herradura (estilo árabe), el segundo y el cuarto; así como los arcos de herradura puntada (estilo mudéjar), el primero y el tercero. Entre ambos pares de arcos aparece un relieve, con forma de tondo, con el emblema de la Catedral que representa la Imposición de la Casulla a San Idelfonso bajo el Sol y la Luna, de ahí el nombre de la puerta.
La planta del edificio esta formada por una zona central flanqueada por dos torreones. Uno es de planta rectangular empotrado en la muralla y el otro, el exterior, es de planta semicircular con matacanes en su exterior. Internamente consta en dos cuerpos, más la azotea.
Como elementos defensivos aparecen las buhardas (habitáculos cuyo suelo tiene una abertura alargada y estrecha) situados encima de los accesos de la puerta.